PULLMAN, Washington – El hombre que encontró a Aaron Aung y a su hija de dos años, Seraya Aung, en México habló exclusivamente con John Webb de NonStop Local el miércoles.
El FBI corroboró que Martín Ceballos fue el hombre que reportó la desaparición de la niña a las autoridades mexicanas.
Aung fue arrestado recientemente por la policía mexicana y entregado a la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos.
Aung, oriunda de Moscú, Idaho, era buscada por la policía de Pullman por no devolver la niña de dos años a su madre para intercambiar la custodia.
Huyó a México con Seraya y su supuesta prometida, Nadia Cole. Cole ya regresó a casa.
El regreso de Seraya a casa se debe a Ceballos, quien notó algo fuera de lo común e hizo algo al respecto.
“Había algo que me decía ‘sabes que tienes que hacer algo por la niña’. Eso era lo que más tenía en mente: la bebé”, dijo Ceballos. “Así que cuando vi esto y las cosas empezaron a hacerme cosquillas, diciéndome que tenía que hacer algo, fue cuando reaccioné”.
Ceballos dice que el miércoles pasado Aung se estacionó cerca de su casa en Nogales, México.
Aquí hay una fotografía de Aung y Seraya tomada con una cámara de timbre.
“Lo vi bajar del auto con el bebé Seraya”, recordó Ceballos.
Ceballos dijo el miércoles que le preguntó a Aung de dónde era.
“Lo dijo murmurando y luego tardó un rato en responderme y dijo desde Washington”, dijo Ceballos.
Ceballos dijo que Aung preguntó dónde podía encontrar asilo político, lo que, según Ceballos, hizo sonar una alarma.
“Entonces me dije ‘qué demonios’. Mi mente siguió dando vueltas”, dijo Ceballos.
Ceballos llamó a su hija, que vive en Tucson, Arizona, y le dio una descripción de su auto. Ella lo revisó y encontró el cartel del niño desaparecido.
“Así que fuimos hasta el centro de la ciudad, a una de las estaciones principales de la policía, y él dijo: ‘Bueno, vámonos. Lo vamos a arrestar ahora mismo’”, recordó Ceballos.
Aung fue arrestado por la policía mexicana y deportado a Estados Unidos, donde ahora se encuentra en el centro de detención del condado de Santa Cruz, en Arizona.
“Me sentí muy bien. Me siento aliviado. Estoy feliz de haber hecho algo por alguien”, dijo Ceballos.
Aung está esperando su extradición. Una vez que regrese al condado de Whitman, se presentará ante un juez en su primera comparecencia ante el tribunal.
La policía de Pullman dijo que enfrentará un cargo de interferencia de custodia, que conlleva un máximo de cinco años de prisión.
