ESTADOS UNIDOS – La Ley de Modernización de la Fuerza Laboral Agrícola está destinada a hacer dos cosas principales si se aprueba. Lo primero es mantener la comunidad trabajadora agrícola y el segundo es darles un camino hacia la ciudadanía.
Los sindicatos de trabajadores agrícolas no están de acuerdo sobre si el proyecto de ley finalmente ayudaría a los trabajadores agrícolas o los perjudicaría. United Farm Workers Union apoya el proyecto de ley.
El Director de Comunicaciones Antonio De Loera dijo que han estado en pláticas con los trabajadores agrícolas y lo que quieren es ciudadanía.
“Hay más de un millón de trabajadores agrícolas en los Estados Unidos hoy en día que son indocumentados y están en riesgo constante de deportación,” dijo De Loera. “La Ley de Modernización de la Fuerza Laboral Agrícola daría a los trabajadores agrícolas un estatus legal protegido con un camino real hacia la ciudadanía.”
Sin embargo, este proyecto de ley es un compromiso. El proyecto de ley también expande el programa de visas H-2A. Bajo este programa, muchos trabajadores agrícolas han estado sujetos a malas condiciones de trabajo y los empleadores los han amenazado con la deportación si hablan.
De Loera dijo que aunque eso no es lo ideal, estas condiciones no cambiarían por el acto.
“Seguiremos abordando esos problemas ya sea que se apruebe o no este proyecto de ley,” dijo. “La diferencia es que los trabajadores agrícolas indocumentados, que son una gran parte de la población a la que servimos nosotros y otras organizaciones, tendrán la seguridad, la estabilidad y la protección que viene con un camino legal hacia la ciudadanía.”
Otro sindicato de trabajadores agrícolas, Familias Unidas Por Justicia, dijo que este proyecto de ley sería otra forma de que los empleadores exploten a los trabajadores agrícolas.
El director político Edgar Franks dijo que permitiría a los empleadores amenazar con la deportación diciendo que un trabajador no cumple con los requisitos de residencia si habla en contra de las condiciones laborales.
“En la agricultura, la cultura de la intimidación y las represalias es muy común,” dijo Franks.
Familias Unidas Por la Justicia tampoco está de acuerdo con la expansión del programa E-verify. Si se aprueba el proyecto de ley, los empleadores del sector agrícola deberán verificar la elegibilidad de los trabajadores agrícolas para trabajar en los Estados Unidos. Esto significaría que los nuevos inmigrantes que ingresan al país no pueden obtener trabajo agrícola.
Franks dijo que el sindicato tampoco está de acuerdo con la cantidad de tiempo que tomaría asegurar la ciudadanía bajo la ley. Requeriría que una persona indocumentada solicite el estatus de trabajador agrícola certificado (CAW) y luego solicite una tarjeta verde si cumple con los requisitos y ha trabajado en la industria el tiempo suficiente, y luego eventualmente la ciudadanía. La persona también está abierta a la deportación mientras se considera su solicitud CAW.
“De ocho a 10 años… quién sabe cómo se verá el mundo entonces con los incendios forestales y las sequías,” dijo Franks. “Creo que los trabajadores agrícolas han demostrado y sacrificado lo suficiente como para esperar más.”
A Familias Unidas Por la Justicia le gustaría ver un camino más inmediato hacia la ciudadanía para todos los trabajadores indocumentados. De Loera dijo que lograr que ambas partes estén de acuerdo en algo ha sido difícil y UFW ve este proyecto de ley como un gran paso adelante para los trabajadores agrícolas.
“La razón por la que estamos trabajando tan duro para que esto se apruebe es porque sabemos que, después de todo, es lo que nos han pedido los campesinos,” dijo De Loera.
El proyecto de ley fue aprobado por la Cámara de Representantes el marzo pasado y ahora está en el Senado esperando una votación. Actualmente cuenta con el apoyo de demócratas y republicanos.
