Rusia está brindando refugio a Bashar al-Assad, habiendo transportado al exlíder sirio allí “de la manera más segura posible” después del rápido colapso de su régimen, dijo el viceministro de Asuntos Exteriores de Rusia a NBC News en una entrevista exclusiva el martes.
“Está seguro, y eso demuestra que Rusia actúa como se requiere en una situación tan extraordinaria”, dijo Sergei Ryabkov, convirtiéndose en el primer funcionario ruso en confirmar la presencia de Assad en el país.
“No tengo idea de qué está pasando con él en este momento”, dijo Ryabkov, y agregó que “sería muy incorrecto que yo diera más detalles sobre lo que sucedió y cómo se resolvió”.
El presidente ruso, Vladimir Putin, ha sufrido un duro golpe con el colapso de un régimen al que dio todo su apoyo, ayudando a Assad a aferrarse al poder después de que Siria se sumiera en una guerra civil y a mantener la brutal dinastía de su familia, que comenzó en 1971.
Ryabkov dijo que Rusia seguirá apoyando al líder sirio, cuyo régimen ha sido acusado por grupos de derechos humanos, denunciantes y exdetenidos de ataques con armas químicas y bombas de barril y otros crímenes de guerra, así como de asesinato, tortura sistemática y la desaparición forzada de decenas de miles de personas desde el levantamiento masivo de 2011, que desencadenó ese conflicto.
“Rusia no es parte de la convención que estableció la Corte Penal Internacional”, dijo Ryabkov cuando se le preguntó si el Kremlin entregaría a Assad para ser juzgado.
Siria no se ha unido a la corte, que tiene su sede en La Haya, Países Bajos, y no ha aceptado su jurisdicción. Rusia y China bloquearon un intento de imponer su jurisdicción en 2014. Estados Unidos e Israel tampoco reconocen la jurisdicción de la CPI, que no tiene policías para hacer cumplir sus órdenes judiciales.
Por otra parte, en marzo de 2023, el tribunal emitió una orden de arresto contra Putin por “crímenes de guerra” al supervisar el secuestro y deportación ilegal de niños de Ucrania a Rusia.
Y el mes pasado, la CPI emitió órdenes de arresto contra el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, y su exministro de Defensa, Yoav Gallant, por presuntos crímenes contra la humanidad y crímenes de guerra en Gaza. Israel rechazó los cargos y Estados Unidos dijo que rechazaba la decisión.
Asad “fue acusado por el mismo grupo de países y gobiernos que continuamente derrotan los intentos de vivir a su manera, como sucedió en Irak, en Libia y en muchos más”, dijo Ryabkov, y agregó que era “asombroso, pero también muy revelador”, que Estados Unidos “configure su reacción y respuesta” dependiendo de a quién esté procesando el tribunal.
Sea quien sea el que acabe gobernando Siria, ya sea el grupo militante Hayat Tahrir al-Sham (HTS), que lideró a las fuerzas rebeldes cuando irrumpieron en Siria, o cualquier otro, dijo Ryabkov, Rusia cree “con firmeza y contundencia” que Siria “debe ser soberana, unificada e integral”.
“Esperamos que no lleguemos a una situación que suponga la separación de partes de Siria”, añadió.
También instó a Israel a “considerar seriamente lo que está pasando en los Altos del Golán”, después de que Netanyahu ordenara a sus militares tomar el control de la zona desmilitarizada y patrullada por la ONU con Siria que se estableció en virtud de un acuerdo de alto el fuego de 1974. Israel, dijo Ryabkov, debería respetar ese acuerdo y “no debería infringir” la integridad territorial de Siria.
Una cosa que Rusia sí compartía con Estados Unidos era la preocupación por la posibilidad de que resurgiera el grupo terrorista Estado Islámico (ISIS) en Siria, dijo. Estados Unidos ha lanzado múltiples ataques aéreos contra objetivos de ISIS en Siria, donde mantiene una pequeña fuerza.
En otro asunto, Ryabkov añadió que el Kremlin “definitivamente estaría preparado para considerar” otro intercambio de prisioneros, similar al de agosto que resultó en la liberación del periodista del Wall Street Journal Evan Gershkovich y otros tres residentes estadounidenses del cautiverio ruso.
Acuerdos como este requerían “un enfoque de múltiples fases o pasos por ambas partes”, incluido en algunos casos el indulto de quienes cumplían condenas. Varios otros países, entre ellos Alemania y Eslovenia, participaron en el acuerdo mediado por Turquía.
Si bien no “quería adelantarse a nada”, Ryabkov dijo que este tipo de acuerdos ayudan a mejorar la relación entre Rusia y Estados Unidos, y agregó que un nuevo acuerdo sería “un paso saludable hacia adelante, especialmente al comienzo de la próxima administración”.