El Superintendente de Instrucción Pública de Washington, Chris Reykdal, le está pidiendo al Gobernador Jay Inslee que haga que las vacunas contra Covid-19 sean obligatorias para todos los maestros y el personal de K-12.
En una carta enviada al gobernador, Reykdal dice que “le anima a que emita una orden ejecutiva que requiera que todos los empleados que trabajan en las escuelas públicas K-12 se vacunen contra el Covid-19 como condición de empleo.”
Reykdal también dice que los estudiantes que potencialmente pierden tiempo para el aprendizaje en persona debido a que Covid-19 causa cuarentenas e incluso cierres de escuelas es “una amenaza real.”
Reykdal también insta a Inslee a que, si decide exigir la vacunación para los empleados de la escuela, permita exenciones médicas y religiosas, de acuerdo con su orden de exigir la vacunación para los empleados estatales.
“Al consultar con varios de nuestros socios y partes interesadas en la educación K-12,” escribe Rekydal, “me dijeron de manera inequívoca que si va a tomar la decisión de exigir la vacuna a los empleados de la escuela, hará una diferencia significativa si esa decisión se toma lo antes posible.”
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