El Servicio de Ciudadanía e Inmigración (USCIS) podrá portar armas de fuego, investigar a quienes violen las leyes migratorias, ejecutar órdenes de registro y arresto, además de ejercer otras atribuciones habituales de cuerpos federales de seguridad estadounidense.
La nueva regla además otorga al director de USCIS la capacidad de ordenar deportaciones expeditas y de investigar violaciones civiles y penales de las leyes migratorias bajo la jurisdicción de la agencia.