KINSHASA, Congo – Tres estadounidenses acusados de participar en un intento de golpe de Estado el mes pasado en el Congo comparecieron el viernes en un tribunal militar de la capital, Kinshasa, junto con decenas de otros acusados en el primer día de audiencias.
El proceso ante un tribunal militar al aire libre se transmitió en vivo por televisión local.
Seis personas murieron durante el fallido intento de golpe del mes pasado, el cual fue encabezado por Christian Malanga, un político de oposición poco conocido, y que tenía como objetivos el palacio presidencial y a un aliado cercano del presidente Félix Tshisekedi. Malanga murió baleado tras resistirse al arresto poco después de transmitir en vivo el ataque en sus redes sociales, dijo el ejército congoleño.
Los acusados enfrentan una serie de cargos, muchos de los cuales conllevan la pena de muerte, incluidos los de terrorismo, asesinato y asociación delictuosa. El tribunal indicó que había 53 nombres en la lista, pero los de Malanga y otra persona fueron eliminados después de que se presentaron certificados de defunción.
Marcel Malanga, un estadounidense de 21 años e hijo de Malanga, y otros dos estadounidenses están siendo juzgados por su presunto papel en el ataque. Los tres solicitaron un intérprete para traducir el proceso del francés al inglés.
El hijo de Malanga fue el primero en ser interrogado por el juez, quien le pidió que confirmara su nombre y otros detalles personales. El oficial militar elegido para la traducción aparentemente no entendía bien el inglés. Eventualmente se seleccionó a un periodista, quien también tuvo problemas para traducir cifras y algunos otros detalles del proceso jurídico.
“No está interpretando correctamente. Necesitamos otro intérprete que entienda inglés, por favor”, le dijo Marcel Malanga al juez después de que el periodista tradujo incorrectamente su código postal.
Pero no se pudo conseguir otro traductor y los acusados tuvieron que conformarse con el periodista, quien trabaja para la radio nacional. Malanga lucía frustrado y desafiante mientras la entrevista avanzaba con dificultad.
Tyler Thompson, de 21 años, voló al Congo desde Utah junto con el hijo de Malanga para lo que su familia creía que eran unas vacaciones totalmente pagadas por el padre fallecido. Los jóvenes habían jugado juntos fútbol americano en la escuela secundaria en los suburbios de Salt Lake City. Otros compañeros de equipo acusaron a Marcel de ofrecerles hasta $100,000 para que lo ayudaran con un “trabajo de seguridad” en el Congo.
Benjamin Reuben Zalman-Polun, de 36 años, es el tercer estadounidense acusado. Estuvo sentado en la última fila y fue el último en ser entrevistado por el juez. Le dijo al tribunal que era soltero y tenía tres hijos. The Associated Press no ha podido ponerse en contacto con sus familiares para comentar al respecto.
Los acusados comparecerán ante el tribunal nuevamente el próximo viernes para continuar con el juicio.