El líder de la Agencia para Refugiados de la ONU sugiere que las deportaciones de Trump violan la ley internacional

El director de la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) declaró esta semana que sería un “error catastrófico” revertir a nivel mundial políticas de asilo, y dijo que las medidas que han tomado Gobiernos como el del estadounidense Donald Trump en esa línea son muy preocupantes y posiblemente contravienen la ley internacional.

“Me preocupa mucho que las discusiones políticas actuales en lugares como Europa y las medidas de deportación en lugares como Estados Unidos están procediendo de maneras que no son consistentes con la ley internacional”, dijo Filippo Grandi, el Alto Comisionado para los Refugiados de la ONU, este lunes.

Grandi, que dejará el cargo a finales de este año, advirtió además que los recortes a los fondos para la ACNUR, que han resultado en al menos 5,000 despidos en la agencia, pueden dejar en todavía mayores aprietos a las personas refugiadas que huyen de la persecución o guerra en todo el planeta.

El ACNUR provee apoyo a, entre muchos otros, los millones de venezolanos que han huido de su país desde 2017 y a personas desplazadas por los conflictos en Siria, Ucrania, Afganistán, Sudán y Birmania.

La ACNUR depende para gran parte de su presupuesto, que en años recientes de por sí ha tenido un déficit, de fondos que son dados por los Estados miembros de la ONU a esa organización.

El Gobierno de Trump pausó esas contribuciones mundiales desde febrero, y también ha suspendido las admisiones de personas refugiadas pese a que ya habían aprobado un proceso de años para recibir ese estatus legal.

En días recientes, la Administración Trump ha indicado que también quiere recortar a un mínimo histórico la admisión de personas asiladas a Estados Unidos, y que los pocos ingresos que habrá serían casi exclusivamente de gente afrikaners, o sudafricanos blancos.